Por Ovidio Vargas.
El secretario general del Partido Liberal Progresista (PLP), Eduardo Brenes, renunció a esta agrupación política, misma que fundó; cuya principal figura es el excandidato presidencial, jefe de fracción y presidente Eliécer Feinzaig, quien logró en su campaña electoral arrastrar con él a seis diputados y generar la existencia de los naranjas en el consciente colectivo.
Brenes advirtió en su carta de renuncia siete vulnerabilidades a las que está expuesto el partido en su situación actual, siendo una de ellas la preocupación de que el PLP ceda su poder a una o pocas personas para convertir al partido en uno “de caudillos” y “de mesías”.
“Tengan cuidado con eso para no convertir al partido en uno de caudillos, de mesías y menos de hombres fuertes. Los principios liberales de escepticismo al poder desmedido y al culto a la personalidad deben de ser aplicados no solo afuera del partido, sino, y sobre todo, adentro de él“, dijo Brenes.
El cansancio y la falta de espacio de acción termina por cerrar su capítulos con los liberales y progresistas.
“Estoy cansado y mi espacio de acción ya se cerró por lo menos de momento. Me voy con pesar pero se que existen las reservas morales en el partido para afrontar los nuevos retos”.
Ahora el exsecretario general, en su carácter de fundador del partido, además fue vicepresidente del PLP y secretario del Comité Ejecutivo Nacional; le hizo algunas observaciones a los miembros del partido, para que tengan cuidado con las decisiones que deberán tomar:
– Crecimiento rápido
Somos un partido más fuerte, más grande, con muchísimos más seguidores que cuando empezamos sí, pero si no se trabaja desde el partido para mantener y hacer crecer ese apoyo es muy fácil perderlo y llegar a desaparecer en futuras elecciones, sobre todo en un contexto partidario nacional tan atomizado y tan proclive a los caudillismos de ocasión.
– No intromisión de diputados en labores del partido
Es al partido y sus autoridades a quienes les corresponde hacerlo crecer, formar sus estructuras, llevar el mensaje liberal a todos los rincones del país y tener aceitada la base que servirá para futuras elecciones. Ni le corresponde al partido regir lo que hace la fracción legislativa, que es legislar y hacer control político, ni a la fracción meterse en funciones propias de la administración partidaria, organización territorial, comunicación y manejo y coordinación de órganos internos.
– Ideas por encima de las personas
Les dejo el reto de que nunca dejen que este partido se convierta en una maquinaria electoral solo con el fin de llevar a una persona al poder, o de ganar elecciones y poner representantes en los diferentes puestos de elección popular. Nuestro aporte a la sociedad tiene que estar sustentado en ideas y propuestas sólidas.
– Contacto con las bases
Un gran fallo de este partido, y me responsabilizo en lo que a mi me corresponde, es la comunicación interna (…) unido a la falta de comunicación está el tema del contacto con las bases. Se sigue trabajando de forma muy vertical, nunca se establecen las expectativas adecuadas a las personas que se acercan al partido y se deja ir a muchísimas personas por abandono, olvido, falta de respuesta y hasta desprecio inentendible de ni siquiera contestarles mensajes o darles la cara.
– Finanzas del Partido
Tengan siempre a un tesorero independiente, preparado y que sepa decir que no a los intereses, no solo de quienes vienen de afuera salivando porque ahora hay recursos, sino también a los que internamente quieren saltarse leyes y reglamentos para usarlo de formas no adecuadas (…) ahora que el partido tendrá acceso a recursos de la deuda política sea vigilantes, exijan transparencia y rendición de cuentas de quienes los administran.
– Caciques regionales
No caer en los caciquismos territoriales que tanto aquejan a otros partidos. Si bien es cierto la elección de estructuras y candidatos toma al cantón o a la provincia como base para conformarla, no dejen que surjan caciques que se conviertan en dueños de quienes ostentarán los cargos en el presente y en el futuro.
El agradecimiento del líder
Por su parte, el excandidato presidencial, presidente del PLP, diputado y actual jefe de fracción; Eliécer Feinzaig, le agradeció en nombre del partido su servicio durante estos años.
“Le agradecemos mucho su profundo sentimiento de civismo y responsabilidad democrática durante todos estos años”, comentó Feinzaig.
Feinzaig añadió que su aporte fue invaluable, pero ante su ausencia tratarán de cubrir la vacante con los talentos que tienen en sus bases.
“Eduardo ha contribuido con invaluables aportes por muchos años. Le deseamos el mejor de los éxitos. Vamos a tratar de cubrir el puesto vacante lo antes posible; afortunadamente, hoy el partido ha crecido y tenemos en nuestras filas y bases muchos excelentes talentos que desean la oportunidad de seguir trabajando en las siguientes etapas, siempre con el firme propósito de aportarle al país de forma desinteresada y responsable, tal como lo hizo él”, concluyó el presidente del PLP.
