Al diputado del Partido Liberal Progresista Eliécer Feinzaig poco o nada le importa si las instituciones entran en crisis y se entraban y dejan de prestar servicios públicos por la aplicación de la regla fiscal implementada por el último gobierno del PAC.
Feinzaig, liberal conservador que volvió a la política luego de ser inhabilitado por la Contraloría hasta el 2014 (por un lío tarifario donde salió beneficiada la transnacional Alterra Partners) defendió la regla fiscal e Carlos Alvarado, tal y como está, pues a su criterio, solo frena el gasto.
El diputado omite referirse abiertamente al impacto, en los servicios al público, que acarrearía el cierre técnico al que se asoman instituciones estratégicas como el MEP, el CNP, el Ministerio de Justicia, derivado de la aplicación de la regla fiscal.
