El hígado es el órgano que más sufre cuando una persona contrae dengue, zika o chikungunya pues en algunos casos podría presentar crecimiento o evolucionar a disfunción o insuficiencia hepática. Es por eso que expertos en la salud de Coopesiba R.L indican que el órgano que más se afecta tras la picadura del zancudo es el hígado.
Posterior a la enfermedad, se hace necesario controlar el conteo de células sanguíneas como glóbulos rojos, blancos y plaquetas, responsables e impedir las hemorragias y que funcionan como “soldados” en la defensa contra las enfermedades.
Es por ello que, los expertos en salud recomiendan realizarse un chequeo general y un hemograma posterior. Uno de ellos es el Dr. Alejandro Álvarez, médico de familia y epidemiólogo de COOPESIBA R.L, cooperativa que administra las Áreas de Salud de Barva y San Pablo de Heredia quien explica que las enfermedades provocadas por los arbovirus, es decir, las transmitidas por insectos o mosquitos dejan secuelas agudas y hasta crónicas. En el caso del dengue afecta las plaquetas, glóbulos rojos y blancos.
“Durante el proceso de recuperación ya sea por dengue, zika o chikungunya es necesario realizar un chequeo médico general para verificar si existe o no un crecimiento del hígado Asimismo, se recomienda un hemograma de control porque nos da información si el paciente quedó con anemia, si los glóbulos blancos están bajos y sobretodo el indicador que más nos interesa es el conteo de plaquetas”, agrega el Dr. Álvarez.
El mecanismo de coagulación depende de órganos como el bazo, médula ósea, pero principalmente del hígado, y cuando se ven alterados tiende a presentar un crecimiento (hepatomegalia). En el caso de las plaquetas pueden a bajar hasta 100 mil cuando se padece cualquiera de las tres enfermedades.
“Tener una medición post enfermedad nos garantiza que los niveles de plaquetas se hayan recuperado. Lo normal es que estén entre los 150 mil a 300 mil, esto se logra con una buena alimentación a base de alimentos verdes como: Espinacas, berros, lechuga, entre otros”, advierte el médico.
Entre las principales secuelas que presentan los pacientes que han sufrido de dengue están: Plaquetas bajas y mal funcionamiento del hígado; en el caso del zika, microcefalia en los bebés; mientras que el chikungunya, cansancio, debilidad y hasta artritis.
De enero a julio de este año, las autoridades identificaron más de 3 millones de nuevas infecciones por dengue y más de 324 mil casos de chikungunya entre los países americanos. Situación que llevó a anunciar a la Organización Mundial de la Salud (OMS) y a la Organización Panamericana de la Salud (OPS) ampliar la vigilancia.
