Con la proximidad del regreso a clases, muchos niños comienzan a experimentar una amalgama de emociones, desde temor hasta impaciencia, al enfrentarse a lo desconocido o simplemente al querer saber qué les deparará el primer día escolar.
Reconociendo la importancia de gestionar estas emociones, Coopesalud enfatiza la necesidad de que padres, cuidadores o encargados inicien un proceso de preparación y adaptación al menos 15 días antes del inicio del curso, brindando a los niños independencia emocional, seguridad y autoestima, elementos fundamentales para facilitar su integración en el aula.
Recomendaciones clave para padres y cuidadores:
- Establezca una rutina de descanso: Mantenga una hora regular de dormir y despertar para establecer una rutina que fomente un descanso adecuado
- Fomentar alimentación saludable: Inicie una alimentación balanceada, incorporando meriendas saludables que contribuyan a la energía y bienestar del niño.
- Compras en familia: Adquiera los materiales, libros y uniformes escolares junto con los niños, involucrándolos en el proceso y generando anticipación positiva.
- Organización y forrado de materiales: Realice la organización y forrado de los materiales escolares en familia, convirtiéndolo en una actividad conjunta y divertida.
- Crea un espacio de estudio: Dedique un área en el hogar específicamente para el estudio, proporcionando un entorno propicio para la concentración y el aprendizaje.
- Conversación positiva: Hable de manera positiva sobre el regreso a clases, destacando la importancia del aprendizaje y la emoción de descubrir nuevas experiencias educativas.
- Explorar emociones: Averigüe cómo se siente el niño respecto al regreso a clases. Si hay preocupaciones, considere visitar la escuela antes de comenzar para que se familiarice con el entorno.
María Sandí, promotora social de Coopesalud, enfatiza la necesidad de un proceso de preparación para evitar que el cambio de rutina afecte el estado de ánimo del niño. Además, destaca la colaboración esencial entre la escuela y los maestros para garantizar un ambiente positivo tanto en el hogar como en el entorno escolar durante este periodo de adaptación.
Por Melany Fallas Vega
