Aarón Chinchilla. – Tras un mes de mesas de diálogo y encuentros multisectoriales en donde se buscaba solventar la crisis fiscal que vive el país, el Gobierno de la República confirmó que acudirá al Fondo Monetario Internacional (FMI) para solicitar apoyo económico.
Mediante comunicado de prensa, el ministro de Comunicación, Agustín Castro, informó que Costa Rica buscará “solventar el problema fiscal del país de manera permanente”, a través de una negociación con el ente internacional.
Adicionalmente, señalaron que para la negociación con el FMI, se tomarán como base los acuerdos alcanzados recientemente en el Diálogo Multisectorial y adicionalmente, el Poder Ejecutivo impulsará propuestas.
«Como se planteó en ese diálogo, esto implica un ajuste fiscal de 2,5% del PIB. La meta es alcanzarlo con una solución que equilibre la reducción del gasto (1% del PIB, además de la reducción necesaria para cumplir la regla fiscal que será de 3 puntos del PIB en los próximos 4 años); con la reducción de exoneraciones (0,7% del PIB) y nuevos ingresos (0,8% del PIB)», precisó Presidencia.
¿Palabra? En medio de la crisis generada por las huelgas y bloqueos que se desarrollaron por el movimiento Rescate Nacional, el Presidente de la República, Carlos Alvarado anunció que no acudiría al FMI y que , como forma para encontrar acuerdos, encaminaría esfuerzos a las mesas muiltisectoriales.
“Entendiendo el sentimiento que existe, pero además la necesidad de tomar acciones viables, el Gobierno no seguirá adelante con su propuesta inicial. Esto, con el fin de dialogar”, señaló el mandatario el 4 de octubre anterior.
A pesar de ello, casi dos meses después, el Ejecutivo cambia su versión y apunta al FMI como solución económica.
No obstante, Casa Presidencial afirma que la ida al FMI no implica un ahorcamiento del país, sino «alcanzar un superávit primario del 1% en el 2023, lo cual permitiría consolidar una trayectoria de estabilidad de mediano y largo plazo en las finanzas públicas».
Esto quiere decir que proyectos como empleo público, la reestructuración de instituciones públicas e incluso la venta de activos estarán en el menú de sesiones extraordinarias que finalizan el último día de julio del próximo año.
A pesar de que parece una decisión tomada, el comunicado de Presidencia señaló que las propuesta la propuesta pedir salvamento al FMI «también se negociará con las fracciones parlamentarias».
«El Gobierno de la República estará informando de manera transparente cuando se fije la fecha de inicio de las negociaciones y conforme surja información relevante para compartir», finaliza el comunicado. La discusión, apenas empieza.