Rafael Zamora, presidente de la Corporación Pedregal, compareció ante los diputados de la Comisión de la Infraestructura donde con sus declaraciones sembró más dudas respecto al actuar del ahora exministro de obras públicas y transportes Luis Amador.
Esto porque aseguró que ellos presentaron dos alternativas para atender los daños en la pista de aterrizaje del Aeropuerto Internacional Daniel Oduber, una de las cuales era más baratas que la que se terminó licitando.
Sin embargo, Amador las rechazó y terminó inclinándose por la forma como se terminó licitando por lo que se refuerza lo dicho por el Presidente de la República cuando anuncio la destitución del ahora exjerarca.
“Nosotros hicimos una propuesta que permitía trabajar las 24 horas del día sin cerrar el aeropuerto y costaba alrededor de $17 millones”, aseguró Zamora. Esta consistía en agregar 500 metros más a la pista para poder trabajar en el resto y así poder cumplir con todo lo requerido.
Es decir que esta alternativa le hubiese ahorrado alrededor de $23 millones, ya que finalmente se adjudicó por $40 millones a la empresa MECO que actualmente es la que está haciendo los trabajos.
Según explicó Zamora, la forma en la que eligieron hacer los trabajos son más caras porque se trabaja bajo presión y hace que sea necesario tener lista la pista en 12 horas, para lo cual no se puede correr riesgos y esto obliga a tener equipos y maquinara ociosa que se debe de cobrar.
Otro detalle que llamó la atención es que la mejora de precios no fue solicitada ni por el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) ni por la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) sino que fue por el Ministerio de la Presidencia.
Justamente, el representante de MECO, José Sánchez, también compareció ante la comisión y negó rotundamente que la licitación se hiciera a su medida, incluso, contrario a Pedregal, ellos nunca hablaron con los jerarcas en el proceso.
Jarmon Noguera González