En 1959 en la zona de Tarrazú se comenzó a formar una comunidad, que por su ubicación está más cerca de Quepos que del centro del cantón al que pertenecen, por lo que se vieron obligados a desarrollar sus propios negocios y manera de generar su empleo y así se formó Coopecampesinos, una cooperativa dedicada al turismo que hoy es ejemplo de lucha y trabajo cooperativo.
Iniciaron con la producción de vainilla, para lo que crearon una asociación, pero en el año 1996 con el huracán césar un hongo acabó con todas las plantaciones, por lo que la economía se les cayó y fue necesario buscar una alternativa, relata Juan Pablo Mora Jiménez, Gerente Coopecampesinos.
Así se dio la oportunidad de adquirir una finca e iniciar una nueva línea de negocio, el turismo para poder generar empleo y oportunidades para los pobladores de la zona, lo cual ha sido la constante de la cooperativa.
Para el año 2007 “empezó a haber un conflicto entre la personería jurídica y la práctica como tal que se estaba dando en el turismo, es así como se busca una estructura legal más equitativa, más lucrativa, más acorde a lo que se estaba haciendo”, recordó Mora.
Es así como tras recibir asesoría y valorar entre una cooperativa de autogestión y una sociedad anónima, se inclinan por el modelo cooperativo con el cual logran que los asociados tengan más sentido de pertenencia.
Incluso ahora “por lo general todos los muchachos que van creciendo mayores a 15 años se empiezan a involucrar en la en la cooperativa, se empiezan a capacitar en el área que vayan a atender, ya sea recepción, mantenimiento, cocina, hay muchas áreas para las que ellos pueden aspirar”, afirmó el Gerente.
Justo para la pandemia, ese modelo fue el que les permitió organizarse y hacer horarios y turnos para que los asociados no dejaran de percibir ingresos pese a que todo estaba cerrado y tampoco perder las instalaciones con las que luego volverían a operar.
Eso fue una lección aprendida y ahora valoran buscar otras líneas de negocio como “el tema de la ganadería, también reforzarlo, porque como dicen no podemos tener toda la esperanza puesta en un solo proyecto, porque ya vimos que si el turismo, cae pues cayeron todos los recursos, en cambio, si tenemos otro proyecto como ganaría o la apertura del restaurante y demás opciones entonces vamos a poder diversificar la demanda, la oferta de servicios, para mantener la población, mantener las familias, mejorar la fuente de ingreso, la educación, el desarrollo social y el desarrollo comunal”, concluyó Mora.